Ex Alcalde de Valencia rechaza proyecto de ordenanza

OMAR SANOJA BREÑA

El proyecto de Ordenanza presentado a la Municipalidad de Valencia parece no realizado por ediles de la ciudad, sino mas bien por los elitéscos grupos anti-taurinos, que constantemente se pasean por las ciudades pretendiendo imponer sus criterios excluyentes, donde soterrada y falsamente argumentan un proteccionismo animal que en definitiva esconde una certera puñalada a las costumbres y tradiciones de la población venezolana, las manifestaciones populares venezolanas como son las corridas y coladeras de toros, peleas de gallo así como las expresiones culturales y tradicionales que realizan nuestros indígenas, no pueden ni deben borrarse de la noche a la mañana, en todo caso, en mi modesta opinión deben conservarse y estimularse para colocarse al lado de las expresiones de los pueblos.

El Toro bravo, el fiero, en su desarrollo el creador del animal lo consiente y lo mima, le confiere el mejor trato, quisieran muchos seres humanos que sus padres lo hicieran, pero este toro en particular, tiene una vida útil y es creado y desarrollado para morir en el ruedo; la regulación o condicionamiento de la actividad taurina apartándose de sus rituales u tradiciones conlleva la desaparición de esta especie, la cual en todo caso debiera ser protegida para su continuidad y permanencia.

El toro de lidia, no es ningún caso un animal doméstico, no se nos puede ocurrir su permanencia en un apartamento o en el jardín de una vivienda, no es un animal para pasearlo en las mañanas por las aceras de nuestros barrios o urbanizaciones, es otra cosa , es otra especie y como tal se debe tratarse.

La verdad que me parece fuera de lógica legislar sobre la materia, aplaudimos ordenanzas sobre regulación de los estacionamientos, de expendio de licores, de desarrollo de zonas urbanas , de materias que impidan, en la medida de sus competencia, la desbordada delincuencia y del asfixiante tránsito de la ciudad, apoyamos obras como la continuidad del Metro, aupamos que la Alcaldía retome proyectos urbanísticos como lo fue en su momento Lomas de Funval, en la Parroquia Miguel Peña, pero ocupar su precioso tiempo en esta materia me parece fuera de contexto, de seguir así, podríamos terminar legislando sobre las jaulas de los cotorra o de los pericos, la presencia de cucarachas y chiripas en el ámbito local o del uso de las cadenas y bozales de los perros de la ciudad.

Si persistimos en cambiar por cambiar, sin hacernos eco de nuestros pueblos, escuchando a sectores privilegiados que siempre han encontrado eco en algunos medios de comunicación, tendríamos que regular o prohibir además de las manifestaciones humanas antes mencionadas, las carreras de caballos, la pesca, la caza y en general toda actividad que sea relacionada con los animales.

En lo personal me parece contradictoria o paradójica, la actitud de regular las expresiones del hombre relacionadas con los animales, por una parte, y estimular o promover enfrentamientos cruentos entre los humanos, donde no pocas veces el hombre o la mujer que interviene en el combate resulta lesionado por el resto de su existencia, ejemplo de ello, es el pesar que nos provoca observar la figura maltratada del legendario boxeador Cassius Clay o mejor llamado Muhammad Alí.

Con la aprobación de esta legislación y el posible ejecútese del Alcalde, los funcionarios municipales de Valencia estrechan posiciones con sus similares del Este de la Zona Metropolitana, hoy y ayer es tan difícil presenciar una corrida de toros en el Nuevo Circo, como tratar de observar desde una plaza portátil la fiesta brava en Chacao, Baruta o en el Hatillo, bueno, no pocas veces los extremos en ocasiones se tocan.